Tenemos todo cuidado con el paciente durante su preoperatoria. Hacemos un masaje facial que contribuye para el relajamiento del paciente antes de la cirugía.
Después de la cirugía el paciente sigue para el gabinete de recuperación, donde recibe todos los cuidados postoperatorios, como drenaje linfático y terapia con láser, para disminuir los procesos inflamatorios y el dolor.
Cuando se realiza el drenaje durante la preoperatoria y el postoperatorio se acelera el flujo linfático diez veces más, dificultando la formación o disminuyendo los edemas tras los procedimientos como cirugías plásticas, injerto de encías, implantes dentales, extracciones de muelas del juicio entre otros.
La técnica oxigena el tejido conectivo y estimula la cicatrización y regeneración de los tejidos, así como la relajación mental antes y después de la cirugía. Así, dejamos el paciente totalmente relajado para el procedimiento, garantizando que se sienta más cómodo y menos tenso con la idea de hacerse un procedimiento quirúrgico.
Todo ese cuidado y comodidad se puede encontrar en Spa Relancer.